La visita apostólica del papa Francisco a Paraguay ha suscitado un renovado celo pastoral en esta porción de la Iglesia latinoamericana y caribeña.
Monseñor Edmundo Valenzuela Mellid, arzobispo de Asunción, comparte con Noticelam algunas resonancias del paso del Santo Padre por su país.
El pueblo paraguayo vivió unos días de fiesta, de fervor y de alegría, con motivo de la visita y la cercanía del Santo Padre, particularmente con las familias.
El Papa iba bendiciendo a todos los grupos que encontraba a su paso.
A parte de este momento emotivo, el Santo Padre nos ha dejado varios puntos centrales.
En primer lugar, en el mundo de la política ha insistido en el diálogo y la honestidad, en la rectitud cuando se realiza el diálogo, que no es simplemente un “teatro” sino que debe ser una búsqueda de la verdad, a partir de la escucha entre los sectores de la sociedad.
También se ha referido a la corrupción, que es la “gangrena del pueblo”.
A nosotros, los sacerdotes y los obispos, nos ha hablado de la hospitalidad.
El Evangelio es profundamente misionero. Los misioneros, los apóstoles, ofrecieron hospitalidad.
El Papa señala que es preciso no ir con doctrinas y teorías, sino privilegiar el encuentro de corazón a corazón.
Él interpreta que la Iglesia es hospitalaria y por lo tanto debe permitir que los corazones se acerquen y se sientan acogidos dentro de la Iglesia.
Los misioneros, los obispos, los sacerdotes, las religiosas y los religiosos debemos tener ese sentido y saber que la Iglesia es un lugar de acogida, es una casa hospitalaria para todos.
Muchas cosas nos dejó el Papa.
A la Conferencia Episcopal nos compromete a dar continuidad a la fiesta que hemos vivido y a sus enseñanzas en estos dos días y medio de visita apostólica
A parte de este momento emotivo, el Santo Padre nos ha dejado varios puntos centrales.
ResponderBorrarEn primer lugar, en el mundo de la política ha insistido en el diálogo y la honestidad, en la rectitud cuando se realiza el diálogo, que no es simplemente un “teatro” sino que debe ser una búsqueda de la verdad, a partir de la escucha entre los sectores de la sociedad.
También se ha referido a la corrupción, que es la “gangrena del pueblo”.