VER VIDEO
Estos padres del ADN rockero, o fundadores del género, no sólo son reconocidos por ser los primeros, o por estar en el lugar indicado en el momento indicado, sino que su nacimiento conlleva a un análisis mas profundo.
Debemos tener presente el contexto histórico en el cual ellos desarrollaron su carrera, la innovación musical y la amplia imaginación al momento de crear, no hay que olvidar que carecían de tecnología (a diferencia de la que encontramos hoy en día), y por sobre todas las cosas, uno de los puntos más importantes, la fuerza y el amor de llevar a cabo un proyecto basándose en una actividad poco común para la época, teniendo en cuenta los factores en contra que esto conllevaba.
Nos referimos justamente a los miedos innatos del ser, desde el repudio a lo "diferente", la censura a lo natural políticamente incorrecto, entre otros.
Para poder resumir la definición, y dar comienzo al análisis del tema en cuestión, podemos decir que:
El rock nacional, es un movimiento artístico cultural influenciado por el Rock "n Roll norteamericano, dentro de un territorio con serios tabúes, en el cual se puede resaltar el valor de estos artistas, tanto en la creación de su música, como su lucha en los momentos de furia y tensión.
El rock fue y es a la actualidad el género más influyente en los jóvenes y no tan jóvenes, de gran reconocimiento internacional el cual abarca diferentes ámbitos, tanto el amor, la política, la justicia, lo irrisorio, los miedos, fantasías, la muerte, las drogas, el sexo.
En pocas palabras, el Rock Nacional, refleja los pensamientos mas escondidos del espíritu inquieto para ser plasmados tanto líricamente como musicalmente.
El rock nacional, habla sobre la vida….y esa vida también está en su formato español.
Elvis Presley
En la década de 1950, en Estados Unidos, los adolescentes buscaban nuevos sonidos, nuevas sensaciones. Por primera vez, una música se dirigía directamente a ellos: el rock and roll.
En tiempos de la esclavitud en los Estados Unidos las comunidades negras desarrollaron un potencial musical en el que predominaban los cánticos religiosos y ritmos propios que marcaban los días de trabajo en las diversas plantaciones que habitaban en aquel entonces.
A nivel musical la influencia de los ritmos y sonidos africanos se hacían presentes generando en un estilo propio y diverso que luego se materializó en el blues, el cual se convertiría en el ingrediente musical que más tarde revolucionaría la música a nivel mundial.
Por otro lado también la influencia de los músicos blancos a través del género musical denominado country y la aparición de la guitarra eléctrica daría nacimiento a lo que se llamó rhythm and blues, padre del rock and roll.
Uno de sus precursores fue Muddy Waters en 1949.
El término rock and roll empezó a utilizarse para aminorar musicalmente el popular ritmo rhythm and blues, el cual denotaba en demasía las luchas raciales para la época, y aunque en esencia los dos géneros musicales representaban lo mismo, se quiso diferenciar uno del otro para dar paso a los cantantes blancos y a la música que no mencione el conflicto racial.
Sus inicios combinan elementos del blues, del boogie woogie, y del jazz, con influencias de la música folclórica Apalache, (hillbilly), gospel, country y western especializado. Suele acreditarse a Muddy Waters como al músico que "pavimentó" el camino hacia el rock and roll.
Hay quienes datan su origen en 1954, con el trabajo discográfico de Bill Haley y su grupo Bill Haley and the Haley's Comets, especialmente con Crazy man crazy (1954) y su gran éxito Rock Around the Clock (1955), que tanta influencia tendría en John Lennon.
Otros consideran como creador a Little Richard o a Elvis Presley y eligen también como fecha del comienzo del rock and roll a 1954, año en el que Presley editó su primer disco.
Entre los músicos destacados de la época se pueden citar a Jerry Lee Lewis, Little Richard, Bo Diddley, Fats Domino, Buddy Holly, Eddie Cochran, y Gene Vincent entre otros.
Desarrollo y evolución
Chuck Berry
A partir de los años 60 tuvo un importante desarrollo y evolución que se expresó a través de gran cantidad de bandas, de ritmos y de estilos que lo convirtió en un fenómeno cultural y musical que se extendió alrededor del mundo.
Consiste en una conjunción rítmica que se asienta esencialmente sobre la música negra. Su popularización sirvió para que muchos músicos pudiesen expresarse y llegar a difundirse en medios locales y nacionales.
Esa es la historia de muchos rockers negros, como el mismo Chuck Berry, quien plasma la realidad social de su entorno en la canción "Johnny B. Goode".
No es sino a partir de los años 1960, cuando decae y deja de ser el ritmo que representaba a los jóvenes rebeldes en los 50, dando paso al género denominado rock o música rock, que marcaría un hito entre la naciente generación joven de los 60.
Sin embargo, de él nacieron distintos subgéneros como el rockabilly, el doo wop o el hard rock, y fenómenos como el de los Teen Idols o las Girl Groups, estos últimos patrocinados principalmente por Phil Spector y de él han derivado géneros como el heavy metal, el garage rock, el punk rock, el rock progresivo o el glam, y entre todos ellos siguen existiendo elementos comunes provenientes del rock n' roll.
Así, Lennon definió al Glam, como "rock n' roll con pintalabios", y a algunos artistas de hard rock o heavy metal como Motörhead o AC/DC les agrada definirse como músicos de rock n' roll.
Análisis musical
En sus inicios y en el estado menos evolucionado, el rock and roll fue un estilo de música sin ninguna influencia blanca que se sirvió de las nuevas técnicas de amplificación de guitarra para comenzar a darle el rol fundamental que lo caracterizaría el resto del siglo.
Aparte de la guitarra, la batería y el piano fueron elementos igualmente fundamentales.
Sandro, considerado uno de los primeros rockeros del país, influyó decisivamente en el nacimiento del rock argentino. Es notable su estética Elvis.
El rock and roll como dijimos anteriormente surge en los EE. UU sobre una base de rhythm & blues; ganando popularidad en los años "50, con músicos como Elvis Presley y Bill Haley (quien visitó la Argentina en 1958), y despertando el interés de varios artistas argentinos en imitar esos sonidos.
Entre esos primeros artistas se encontraban Eddie Pequenino.
La primera agrupación de rock argentina fue Mr. Roll & The Rockers, una banda liderada por Eddie Pequenino, formada en Buenos Aires en 1956 y que tuvo a Lalo Schiffrin como pianista.
La misma interpretó temas de grupos norteamericanos, teloneó a Bill Halley cuando visitó la Argentina e hizo sus propios temas, grabados en un LP por el sello CBS.
Un importante fenómeno para el rock argentino en sus comienzos fueron los músicos chicanos y mexicanos de rock de fines de los "50 y comienzos de los "60. En el primer caso Ritchie Valens impuso en 1957 en La Bamba, el primer hit mundial del rock en español.
En el segundo caso, bandas como Los Teen Tops, Los Blue Caps y Los Locos del Ritmo realizaron adaptaciones en español de temas de Elvis, Chuck Berry, Little Richard, Buddy Holly y otros, que se volvieron clásicos latinos como La Plaga y Popotitos.
Muchos artistas de la época admitieron que esas bandas mexicanas tuvieron una fuerte influencia en los comienzos del llamado "rock nacional" argentino tales como Los Gatos y varios más, no sólo en Argentina sino en casi todos los países de habla hispana.
Litto Nebbia dice en su libro "Música progresiva argentina" que se unió a una banda en 1961 en Rosario y que en ese momento existían muchos grupos influenciados por el rock mexicano.
Las bandas estadounidenses eran la fuente de la música y las mexicanas las que tomaban ese sonido y lo exportaban al resto de la región. Fue en este contexto en el que apareció el primer ídolo fulgurante del rock argentino, Billy Cafaro, quien tuvo un efímero pero resonante éxito con sus singles Pity Pity, Personalidad, Marcianita
En julio de 1961 se graba el simple en 45 rpm, el primer rock en castellano compuesto y cantado por un argentino: El Rock del ton ton y en el lado B el tema de Armando Trejo, Vuelve Primavera.
El apuro de la compañía discográfica por lanzar el éxito musical es tal, que el disco sale sin su nombre. RCA Victor cuenta con una placa que vende más de 1.000.000 de ejemplares en muy poco tiempo.
Éxito en radios, presentaciones y en las calles surge un muchacho con una voz personal, un aire de Elvis y un fraseo argentino que compone, baila, canta y propone una nueva música que todos siguen: es Johny Tedesco.
Tedesco tenía su primer disco de Oro en 1962 y su viaje a Hollywood lo consolida como el intérprete en castellano de éxitos de rock de reconocimiento internacional y conoce al Rey del Rock´n Roll Elvis Presley.
Temas que también serían luego interpretados por otros cantantes argentinos.
Posteriormente Sandro graba versiones de Elvis que Johny había grabado: "Eres un ángel disfrazado", "Bésame pronto", entre otros.
Luego seguiría con "Presumida," "Un montón de amor", "Preciso tu amor esta noche", "Ocho días a la semana," "Coqueta", "La plaga", entre muchos otros temas de su repertorio que confirman su estilo de Rock, twist, blues que abrieron un sendero para que el Rock se instalara y continuara en su evolución permanente.
En 1963 Sandro y Los de Fuego grabaron una serie de versiones de temas de rock clásico y beat, también cantadas en castellano, "Te conseguiré", "Anochecer de un día agitado", "My bonnie", "El dinero no puede comprarme amor", convirtiéndose en uno de los grupos de mayor éxito comercial del momento.
Luego Sandro continuaría la carrera como baladista melódico/romántico que lo llevaría a la fama en toda América Latina, abandonando para siempre el rock. Sandro fue en general rechazado por el mundo del rock argentino, mayoritariamente de clase media, al ser tildado de "grasa", un término despectivo para referirse a ciertos gustos populares, generalmente de sectores trabajadores. Su tema "Tengo" ha sido considerado el Nº 15 entre los 100 mejores de la historia del rock argentino, por la cadena MTV y la revista Rolling Stone.
A partir de los años 90 el rock nacional revalorizaría a Sandro, y varias bandas incluyeron sus temas en el repertorio rockero, algunas de las cuales se volverían importantes éxitos, como "Dame fuego".
1964-1975: El nacimiento del rock nacional
Invasiones británicas y uruguayas
La banda beat Los Shakers fue una de las más destacadas de las "invasiones uruguayas".
En 1964 al igual que en el resto del mundo el fenómeno Beatles cayó como una bomba en la Argentina.
El rock internacional empalmó con una generación (nacida aproximadamente entre 1945 y 1960), politizada y movilizada a través de organizaciones estudiantiles y sindicales, que comenzaba a enfrentarse en la calle a las dictaduras militares (sobre todo a partir de 1966), con una activa participación de los jóvenes, tanto varones como mujeres, de la extensa clase media del país.
Esa generación simbolizó su identidad con el rock y la revolución sexual, que opusieron como ruptura radical al tango y a la doble moral machista de sus padres.
En la Argentina las llamadas invasiones inglesas (con bandas como The Beatles y, especialmente, los Rolling Stones, que influyen a bandas argentinas hasta el día de hoy) fueron mucho más influyentes que la ola de rock & roll clásico estadounidense, tanto para el gusto juvenil inicial por el rock & roll internacional como para el surgimiento del rock argentino.
Los Jets fueron unos de los imitadores de los Beatles más populares en el país, llegando a grabar varios discos con adaptaciones de las canciones del cuarteto de Liverpool.
Pero fueron las notables "invasiones uruguayas" de 1964-1965 las que contribuyeron decisivamente en Argentina para que se comenzara a tocar rock en el país.
Inspirados en el nuevo rock británico, muchos músicos jóvenes uruguayos, comenzaron a emular sus sonidos.
Tres bandas, Los Shakers, Los Mockers y Los Walkers, tomaron el estilo de los Beatles y los Rolling Stones, respectivamente, cantando en inglés y así pasaron a Buenos Aires.
Así fue que, a mediados de los años 60, las bandas beat uruguayas alcanzaron un pico de popularidad en Sudamérica. En aquel entonces era impensable que una banda de rock latinoamericana pudiera tener éxito internacional.
El éxito de las bandas uruguayas fue una notable excepción y solo se limitó a la vecina orilla porteña.
De entre todos los grupos uruguayos, Los Shakers se destacaron en particular. Si bien eran un grupo beat inspirado abiertamente en los Beatles, su sonido se destacó con un estilo propio, una notable calidad musical en sus interpretaciones y originalidad en muchas de sus composiciones.
Los Shakers comenzaron a presentarse en vivo en muchos programas de televisión de Uruguay, Argentina y demás países. Debido a su decisión de no desarrollar las letras de sus canciones en castellano, su popularidad decayó. Hoy en día son considerados como una de las bandas más destacables de los años "beatleros".
Mediados y fines de los años "60
Los Gatos Salvajes en 1964:
La historia de los Gatos comienza allá por el año 1964 cuando en Rosario, en la provincia de Santa Fe, se conocen Litto Nebbia y Ciro Fogliatta y deciden crear un grupo a imagen y semejanza de sus admirados Beatles. Idean el nombre de "The Wild Cats" pero Litto y Ciro se deciden por la traducción al idioma telúrico como "Los Gatos Salvajes" y bajo ese nombre grabaron, en el invierno del "65, su primer y único LP.
Un año después el grupo cambió algunos integrantes y también su nombre original por el de "Los Gatos". No sólo cambiaban los nombres de las bandas y sus historias sino que también comenzaba una etapa de cambios en el gobierno de la nación, donde Juan Carlos Onganía se hacia cargo del sillón presidencial, después del golpe militar del 28 de junio.
El nuevo orden militar disolvió los partidos políticos, anuló el derecho de huelga y en el mes de julio desató una violenta represión contra el estudiantado, recordada como "La noche de los bastones largos".
Un mes después del golpe de estado, las universidades públicas argentinas estaban organizadas de acuerdo a los principios de la Reforma Universitaria, que establecían la autonomía universitaria del poder político y el cogobierno tripartito de estudiantes, docentes y graduados.
El estallido ocurrió el 28 de julio de 1966 cuando estudiantes y docentes manifestaban en la Universidad. La represión fue particularmente violenta en las facultades de Ciencias Exactas y Naturales y de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires.
La policía tenía órdenes de reprimir duramente. El nombre proviene de los bastones largos usados por la policía para golpear con dureza a las autoridades universitarias, los estudiantes, los profesores y los graduados, cuando los hicieron pasar por una doble fila al salir de los edificios, antes de ser introducidos en los camiones para llevarlos detenidos.
Fueron detenidas 400 personas y destruidos laboratorios y bibliotecas universitarias. Como resultado de esta política represiva, cientos de científicos e investigadores se exiliaron, lo que constituyó una significativa "fuga de cerebros".
En el ámbito musical la represión se sintió de la misma forma, prohibiendo artistas, y cantantes que encontraron como único refugio el exilio. (Mercedes Sosa, Atahualpa Yupanqui, entre otros).
La dictadura de Onganía entre otras prohibiciones incluía el uso del pelo largo, que podía ser podado en cualquier comisaría, también mostraba una especial preocupación por la conducta sexual de las parejas en los parques.
Como toda dictadura militar, mientras los hombres de uniforme se ocupaban de la "moral y las buenas costumbres" sus socios liberales se ocupaban de la economía y posibilitaban que las transnacionales y sus sirvientes nativos hicieran grandes negocios a costa de la mayoría del pueblo argentino.
Menos comprometidos con la realidad del país, llegan como dijimos anteriormente desde Uruguay Los Shakers, de los hermanos Fattorusso, y poco a poco todos comenzaron a converger en Pasarotus, un boliche de jazz en Pueyrredón al 1700 que cambió su denominación por La Cueva, un lugar que, junto a La Perla de Once, Plaza Francia, el Instituto Di Tella y algunos otros pocos sitios marginales o casi desconocidos, fueron centros de reunión del incipiente movimiento.
Los primeros en grabar fueron Los Beatniks, (cuyo líder Mauricio Birabent con el tiempo pasaría a llamarse Moris) quienes en junio de 1966 lanzaron a la calle su primer simple "Rebelde". Vendieron solo 200 copias.
En 1967 Litto Nebbia y Los Gatos dieron la primer estocada: su disco simple debut, "La Balsa"-"Ayer nomás", vendió nada menos que 200.000 copias.
El rock argentino tenía su primer éxito masivo y el movimiento cobraba fuerza. Comenzaron los festivales, los productores prestaron mayor atención al fenómeno, apareció la revista "Pinap", la legión de jóvenes se engrosó considerablemente y nuevos músicos se atrevieron a mostrar lo suyo.
Con la aparición de Manal y Almendra, junto con Los Gatos, el rock tenía su trilogía esencial, y aquellos tibios intentos de Los Beatniks y otros comenzaban a dar sus frutos.
La década del '70 recibió al rock como movimiento en pleno desarrollo. Ya no sólo estaba Almendra, Manal y Los Gatos. Nuevas bandas y solistas se sumaban al género, cada uno con sus propias ideas, sueños y convicciones: Vox Dei, Arco Iris, Pedro y Pablo, La Barra de Chocolate, La Pesada del Rock and Roll y muchos otros. Por entonces, el incipiente rock argentino era denominado "Música Beat".
Pero el rock iba más allá del éxito momentáneo con estribillos pegadizos. En Belgrano surgió Almendra, con Spinetta a la cabeza. En Caballito, de la unión de Charly García y Nito Mestre se forma Sui Generis. Miguel Peralta, cantante folklórico, se asomó un día por La Cueva y aceptó como desafío y a modo de repudio cantar "Vidala del angelito"
Lo aplaudieron a rabiar. Muy pronto se haría llamar Miguel Abuelo. El grupo conformado por Gabis, Martinez y Medina tocaba Blues y se llamaba Manal.
Almendra tuvo mejor suerte y su tercer simple se convirtió en un éxito: "Tema de Pototo" luego "Muchacha ojos de papel" se convertiría en otro gran clásico del rock nacional.
Un grupo de Quilmes llamado Vox Dei venía pisando fuerte. Su primer simple, Azúcar amarga, dejó claro su enorme potencial. Los festivales comenzaron a ponerse de moda.
El primer concierto masivo fue el Festival Pinap, organizado por la revista del mismo nombre. 12.000 personas llegaron al lugar para ver los shows de Almendra, Manal y otros grupos de barrio. En 1969, se separan
Los Gatos momentáneamente y volvieron a reunirse con Pappo reemplazando a Galiffi.
Se volcaron a un estilo más rockero hasta que se disolvieron definitivamente a fin de año. Pappo forma: Pappo"s Blues, Aeroblues y posteriormente sería Riff hoy una leyenda.
La relación de los de Almendra se desgastó y terminaron separándose. Manal grabó un disco brillante, pero el sello comenzó a zozobrar financieramente y Manal se separó.
La Cofradía de la Flor Solar fue el primer grupo en intentar un modo de vida comunitario.
Aparecieron en 1969, grabaron en 1971 y apoyaron a otro dúo que venía trabajando desde hace tiempo: Pedro y Pablo, es decir Miguel Cantilo y Jorge Durietz..
En 1971 Vox Dei dejó grabada la primera obra conceptual: "La Biblia". Los medios de difusión seguían vedados para la gran mayoría de los rockeros.
En febrero de 1970 apareció la revista "Pelo" con los objetivos de apoyar a los progresivos y diferenciarlos de los complacientes, pero eso no bastaba para apuntar a un movimiento que cada vez contaba con mayor cantidad de artistas y recitales.
Los festivales B.A. Rock -organizados por "Pelo"- congregaban multitudes, pero los medios de comunicación tergiversaban los acontecimientos y las posibilidades de trascendencia masiva no eran muchas.
En el período 72-73 se produjo un sub-movimiento que, resistido en un principio por los propios rockeros, logró finalmente allanar el camino de la masividad: el rock acústico.
Color Humano, Pescado Rabioso, Aquelarre, Vox Dei, Arco Iris, Alma y Vida, Moris, Litto Nebbia, Pappo"s Blues y algunos pocos más, eran los nombres importantes del panorama, pero la aparición del rock acústico de la mano de León Gieco, Raúl Porchetto, Miguel y Eugenio, Vivencia , Pastoral y Sui Generis modificó las estructuras musicales y amplió el horizonte.
Ya no se necesitaban instrumentos eléctricos para comunicar el mensaje del rock. En el auditorio Kraft de la calle Florida se produjo un "acústicazo" de entrecasa. León Gieco, Raúl Porchetto y Sui Generis brindaron dos shows sorpresivos bajo el nombre de Porsuigieco.
La violencia ya era pan de todos los días en Argentina, y se trasladó también al rock. Primero fue la muerte de José Alberto Iglesias, Tanguito, quien terminó su vida bajo las ruedas de un tren en Palermo.
Los grupos más populares del '75 fueron Aquelarre, Invisible y Sui Generis que con "Confesiones de Invierno" consolidó su prestigio y pegó el estirón con "Pequeñas anécdotas sobre las instituciones".
Ese disco fue censurado por ser una sátira sobre la vida política del país. Tuvieron que dejar fuera dos temas, "Juan represión" y "Botas locas", y pulir otros tres temas. Un grupo similar a Sui Generis fue Vivencia, quienes lograron el éxito con el tema "En mi cuarto".
Otro dúo acústico fue Pastoral, y su momento llegaría con su segundo disco, "El Hospicio". Ya en 1975, Sui Generis era el número indiscutido del rock argentino y su separación a fines de ese año congregó una verdadera multitud en el estadio Luna Park.
El 24 de marzo de 1976, la presidente Isabel Perón es derrocada por un golpe militar, y el nuevo gobierno ajustaría las clavijas en el rock que, como movimiento joven, pasó automáticamente a ser considerado sospechoso.
Con la separación de Sui Generis tres nuevas agrupaciones surgieron y captaron la adhesión de un amplio sector de audiencia: Los Desconocidos de Siempre (Nito Mestre), La Máquina de Hacer Pájaros (Charly Garcia) y Polífemo (David Lebón).
Muchos de los pioneros del rock argentino habían emigrado al exterior en busca de nuevos horizontes. Ya no estaban Edelmiro Molinari, Miguel Abuelo, Miguel Cantilo, Claudio Gabis, Javier Martinez y otros, pero Invisible, Gieco, Porchetto, Alas, Arco Iris, Soluna, Nebbia Trío, Espíritu, Crucis, El Reloj y muchos otros cubrían las necesidades de un público que seguía aumentando en número.
El rock seguía adelante pero el clima de represión y terror comenzó a hacerse sentir. Muchos músicos eligieron exiliarse. Otros optaron por resistir. En la Argentina de 1976 nadie podía sentirse seguro, y el rock no era excepción a esa regla.
El Golpe de Estado del año 1976, dio inicio al período más oscuro y sangriento de la historia argentina. Los músicos de rock, considerados "subversivos", sufrieron los embates de la dictadura militar.
Muchos se vieron obligados a irse del país. Otros buscaron resistir e insistir con su arte. Ser joven era ser "sospechoso", estar asociado a "cosas raras".
Para muestra basta un botón: en noviembre de 1977, el almirante Emilio Massera dio un discurso en la Universidad del Salvador, e instó a no seguir el ejemplo de los jóvenes "que se inician en el rock y derivan en la guerrilla".
Eran tiempos de la película "Fiebre de sábado por la noche", la música disco, el baile que sustituía al canto, y el inglés que reemplazaba al castellano.
Escuchar rock o asistir a los pocos recitales que se hacían era un símbolo de resistencia.
Para los jóvenes, la música era casi una excusa para forjar su identidad, su grupo de pertenencia.
León Gieco, rockero con raíces folclóricas, fue un baluarte importante en este período. Sus canciones eran nuevamente censuradas por los grandes medios, pero no podían evitar que el público siguiera sus presentaciones.
El genio de Charly García hizo un aporte fundamental, acompañado por excelentes músicos. Con David Lebón, Pedro Aznar y Oscar Moro formó Serú Girán, banda que muchos definieron como "Los Beatles argentinos".
Sus letras lograron gambetear la censura del terrorismo de Estado. Con sutileza, energía e ingenio, las canciones de Serú se convirtieron en himnos para la juventud. Grabaron su primer disco en mayo de 1978, a pocos días de comenzar la euforia por el Mundial de Fútbol.
Algunos clásicos intentaron la vuelta, como Manal, Almendra, Moris y Miguel Cantilo. Pappo fundó el grupo Riff, con un perfil de rock más pesado que Pappo's Blues, su anterior banda.
En La Plata nacía Virus, una expresión new wave de los hermanos Federico y Marcelo Moura. El rock andino tenía sus representantes en Los Jaivas, Ollantay y Tantu Kay. En Mendoza debutaban Los Enanitos Verdes. Otros protagonistas de esos años que pisaban los '80 eran Spinetta Jade, Suéter, Dulces 16, Ariel Prat y su Banda Elástica, Rubén Rada, Alejandro del Prado y Solopororó, liderado por Alejandro Lerner.
Había música para todos los gustos en los circuitos de bares y recitales, pero las radios le daban la espalda. Hasta que una locura militar le abrió una puerta inesperada al Rock Nacional.
La Guerra de Malvinas de 1982 trajo consigo la prohibición de pasar música anglosajona por las radios.
Los programadores recurrieron entonces a las grabaciones de artistas argentinos. Fue el empujón clave para que el gran público conociera a todas esas expresiones jóvenes que en su momento marginaban.
El 16 de mayo de 1982 se organizó en Obras Sanitarias el Festival de la Solidaridad Latinoamericana, para juntar ropa y alimentos para los soldados que combatían en Malvinas.
Más de 60 mil personas estuvieron en el estadio, y muchos más siguieron las transmisión en vivo del concierto de Gieco, Spinetta, Mestre, Rada, García y Lebón (estos dos últimos ya habían desarmado Serú Girán en marzo), entre otros. La era de la masividad había llegado.
El fracaso en Malvinas marcó el comienzo del fin para la dictadura militar, con su consecuente apertura política e ideológica.
El Rock Nacional, ya instalado, comenzó a crecer en cantidad y calidad de bandas. Los nuevos se sumaban a los clásicos, y el panorama se amplió.
El 30 de octubre de 1983 los argentinos volvían a las urnas, con fondo musical rockero.
a trágica jugada guerrera en las Malvinas tuvo como pilar un auge de carácter nacionalista y anti-inglés que permitió que los "enemigos internos" -como los militares consideraban a los jóvenes rockeros- fueran oficializados y bendecidos ante la nueva realidad.
Grupos y solistas incluidos en el circuito rockero y de la canción popular que eran prohibidos y perseguidos hasta el extremo de padecer que cada recital tuviera un curso incierto y peligroso para ellos y su público, fueron asimilados y estimulados "gracias" a la prohibición de la música en inglés en las radios y en la TV.
Así fue que tanto los rockeros como los cantautores, señalados por "jóvenes" y "extranjerizantes", lograron acceder a un circuito formal que les estaba vedado y hasta pudieron, en medio de la celebración malvinense, colar estéticas y canciones que también cuestionaban la dictadura militar instaurada en 1976.
León Gieco patentó como himno "Sólo le pido a Dios" pero también cantó "El país de la libertad"; Pedro y Pablo cuestionaron a Margaret Thatcher en "Señora violencia e hijos" pero no olvidaron "La marcha de la bronca"; y Charly García resumió devastadora ironía y crítica en "No bombardeen Buenos Aires" sin por ello dejar de lado la denuncia de "Inconsciente colectivo" o "Canción de Alicia".
En el amplio abanico también salió a la luz Víctor Heredia con "Aquellos soldaditos de plomo" y estrenó (casi en paralelo con la derrota militar) su "Informe de la situación"; mientras que hasta Los Violadores fueron bendecidos por hacer "punk argentino", aunque uno de sus hits fuera el explícito "Represión".
El cancionero malvinense tuvo, además de "Sólo le pido a Dios", su hito coyuntural gracias a la entonces difundida "Reina madre", en la que Raúl Porchetto se ponía en la piel de un soldado inglés para relatarle a su majestad británica las vivencias de la guerra en el Atlántico Sur.
La democratización cultural no sólo hizo renacer a los hasta entonces silenciados, sino que posibilitó una apertura federal cuya máxima expresión fue protagonizada por el desembarco de la llamada Trova Rosarina que acompañó la voz de Juan Carlos Baglietto. Ese grupo de artistas integrado por Fito Páez, Rubén Goldín, Silvina Garré, Jorge Fandermole y Adrián Abonizio, entregó canciones como "Mirta, de regreso", "La vida es una moneda" y "El témpano".
La brisa desfachatada, testimonial y local se aglutinó en los pocos meses que duró la batalla en Malvinas, pero esa fuerza estética acallada por años también sirvió para apuntalar el previsible y doloroso saldo de la guerra y el inevitable fin del oscuro imperio de la dictadura.
Malvinas según "El soldado y la reina de las nieves"
Planteada como una historia de amor, asombro, dolor y testimonio, la canción es una llamativa pieza del también autor de varias de las composiciones básicas que interpreta su coterráneo Juan Carlos Baglietto.
Adrián Abonizio es mentor de temas como "Dios y el diablo en el taller", "Corazón de barco", "Historia de Mate Cosido", "El témpano" y "Mirta de regreso", por citar sólo algunos de los más conocidos.
Otras miradas sobre la guerra
Abonizio no fue el único en abordar el tema de la guerra en sus canciones. En su disco de 1983 "Todo a pulmón", el cantautor Alejandro Lerner incluyó la épica "La isla de la buena memoria". …"No hay mal que no venga al Hombre, no hay un Dios a quien orar / no hay hermanos ni soldados, ya no hay jueces ni jurados / sólo hay una guerra más" clamaba un autor caracterizado por sus canciones de amor como "Por un minuto de amor" y "Testigo el sol".
En su álbum debut de 1989, "Después de la guerra", la banda rosarina Certamente Roma describía la tragedia del conflicto bélico en el tema "Quebrados en el silencio", el mayor hit que tuvo la agrupación liderada por Fabián Llonch.
Rata Blanca también dio su visión de la guerra de Malvinas en "Gente del sur". "No se muy bien / cual fue la gloria / en esta guerra del sur / hoy puedo ver / miles de cruces / en estas islas que Dios / Nos dio a todos los hombres" cantaba Saúl Blanch en el disco debut de la banda de Walter Giardino.
Pero del lado inglés la guerra también inspiró canciones. La más conocida sea tal vez "Brothers In Arms" (Hermanos en armas), que le da título al disco más exitoso de Dire Straits, publicado en 1985.
Junto con la trova rosarina pero no tan comprometidos llegan los Twist, liderados por Pipo Cipollatti, fueron los iniciadores de una corriente musical fresca, divertida, con letras bailables simples y alejadas de la canción contestataria de años atrás.
Las chicas de Viuda e Hijas de Roque Enroll siguieron ese camino. Miguel Abuelo volvió al país y rearmó Los Abuelos de la Nada, esta vez con Andrés Calamaro, Daniel Melingo, Cachorro López, Polo Corbella y Gustavo Bazterrica. Todos componían y cantaban en esa banda que se aprovechaba del pop, funk y reggae. La onda pop se insertaba con éxito, con Miguel Mateos como uno de los líderes de un estilo en principio muy criticado por los rockeros, pero luego aceptado.
El under tenía dos referentes importantes que con el tiempo llegaron a la cima: Sumo y Patricio Rey y Los Redonditos de Ricota. Luca Prodan y el Indio Solari lideraban estas bandas que alcanzaron estatura de mito. Sus seguidores se definían como "gente del palo", y criticaban la ideología "comercial" de los grupos masivos.
Uno de los grupos más importantes del Rock Nacional grabó su primer disco en 1983. Definidos peyorativamente como "modernosos", los Soda Stereo dieron ese año su primer paso hacia el éxito.
Comenzando con pop-rock para luego experimentar con otros sonidos e influencias, destrozarían las críticas y crecerían en popularidad disco tras disco.
En el año 1984 nació el éxito para GIT, un trío formado por Pablo Guyot, Willy Iturri y Alfredo Toth, que integraban la banda de Charly García. Con letras de amor en ritmo de rock, y apoyados en el característico sonido de la batería de Iturri, GIT fue el primer grupo argentino en editar un disco en Estados Unidos.
Ricardo Iorio creó V8, banda metal que duraría tres años. Luego formaría Hermética y Almafuerte y se convertiría en un ídolo de los amantes del rock pesado. Los Violadores surgieron con el punk y fueron uno de los grupos que más sufrió la represión en la primera mitad de los '80.
Sin dudas, 1985 fue un año de grandes discos: "Gulp!", de Los Redonditos, "Divididos por la felicidad", de Sumo, "Locura", de Virus, "Giros", de Fito Páez, "En el Opera", de Los Abuelos de la Nada y "Nada personal", de Soda Stereo.
Miguel Mateos se presentó con Zas en el teatro Coliseo y grabó en vivo "Rockas vivas", el disco más vendido en la historia del Rock Nacional hasta 1992.
Un año más tarde editaron su primer disco nuevas bandas de estilos diferentes. Los Ratones Paranoicos mostraron su rock and roll clásico en una época moderna y pop, mientras que Los Fabulosos Cadillacs atacaron con el ska, al mejor estilo Madness. Con el tiempo, la banda de Vicentico incorporaría ritmos latinos, salseros y afros.
Gustavo Cerati, además de Soda, integraba Fricción, una banda formada con su amigo Richard Coleman. Duraron dos años y editaron dos placas.
En 1987 explotaría el mercado del reggae cantado en inglés por bandas nacionales, espacio que Sumo ya venía frecuentando. El primer éxito comercial lo lograría La Zimbabwe Reggae Band, con su "Natty dread". Luego, Los Pericos venderían 180 mil discos de su "Ritual de la Banana".
La variedad musical de la década no puede quedar completa sin mencionar la fusión de cumbia, rock duro, tango y folclore lograda por Palo Pandolfo en Don Cornelio y la Zona y Los Visitantes.
Tampoco hay que olvidar el vuelo poético y el ritmo de muchas creaciones de Man Ray, la banda de Hilda Lizarazu, o el blues de la Mississippi y Memphis. Ni el suceso de Rata Blanca, primera banda heavy de éxito masivo, o la conjunción de trash, reggae e ideología punk de Todos Tus Muertos.
El estadio de Obras Sanitarias se convirtió en el templo donde las bandas de rock debían tocar para alcanzar la consagración. Varios lograron este privilegio, dejando en el recuerdo las épocas de pequeños escenarios, censura y represión.
A fines de la década murieron tres personajes que fueron clave en la consolidación del Rock Nacional: Luca Prodan (diciembre de 1987), Miguel Abuelo (marzo de 1988) y Federico Moura (diciembre de 1988).
El rock nacional, es un movimiento artístico cultural influenciado por el Rock "n Roll norteamericano, dentro de un territorio con serios tabúes, en el cual se puede resaltar el valor de estos artistas, tanto en la creación de su música, como su lucha en los momentos de furia y tensión.
El rock fue y es a la actualidad el género más influyente en los jóvenes y no tan jóvenes, de gran reconocimiento internacional el cual abarca diferentes ámbitos, tanto el amor, la política, la justicia, lo irrisorio, los miedos, fantasías, la muerte, las drogas, el sexo.
En pocas palabras, el Rock Nacional, refleja los pensamientos mas escondidos del espíritu inquieto para ser plasmados tanto líricamente como musicalmente.
El rock nacional, habla sobre la vida….y esa vida también está en su formato español.
Principales corrientes e influencias
Primeros cantantes y orígenesElvis Presley
En la década de 1950, en Estados Unidos, los adolescentes buscaban nuevos sonidos, nuevas sensaciones. Por primera vez, una música se dirigía directamente a ellos: el rock and roll.
En tiempos de la esclavitud en los Estados Unidos las comunidades negras desarrollaron un potencial musical en el que predominaban los cánticos religiosos y ritmos propios que marcaban los días de trabajo en las diversas plantaciones que habitaban en aquel entonces.
A nivel musical la influencia de los ritmos y sonidos africanos se hacían presentes generando en un estilo propio y diverso que luego se materializó en el blues, el cual se convertiría en el ingrediente musical que más tarde revolucionaría la música a nivel mundial.
Por otro lado también la influencia de los músicos blancos a través del género musical denominado country y la aparición de la guitarra eléctrica daría nacimiento a lo que se llamó rhythm and blues, padre del rock and roll.
Uno de sus precursores fue Muddy Waters en 1949.
El término rock and roll empezó a utilizarse para aminorar musicalmente el popular ritmo rhythm and blues, el cual denotaba en demasía las luchas raciales para la época, y aunque en esencia los dos géneros musicales representaban lo mismo, se quiso diferenciar uno del otro para dar paso a los cantantes blancos y a la música que no mencione el conflicto racial.
Sus inicios combinan elementos del blues, del boogie woogie, y del jazz, con influencias de la música folclórica Apalache, (hillbilly), gospel, country y western especializado. Suele acreditarse a Muddy Waters como al músico que "pavimentó" el camino hacia el rock and roll.
Hay quienes datan su origen en 1954, con el trabajo discográfico de Bill Haley y su grupo Bill Haley and the Haley's Comets, especialmente con Crazy man crazy (1954) y su gran éxito Rock Around the Clock (1955), que tanta influencia tendría en John Lennon.
Otros consideran como creador a Little Richard o a Elvis Presley y eligen también como fecha del comienzo del rock and roll a 1954, año en el que Presley editó su primer disco.
Entre los músicos destacados de la época se pueden citar a Jerry Lee Lewis, Little Richard, Bo Diddley, Fats Domino, Buddy Holly, Eddie Cochran, y Gene Vincent entre otros.
Desarrollo y evolución
Chuck Berry
A partir de los años 60 tuvo un importante desarrollo y evolución que se expresó a través de gran cantidad de bandas, de ritmos y de estilos que lo convirtió en un fenómeno cultural y musical que se extendió alrededor del mundo.
Consiste en una conjunción rítmica que se asienta esencialmente sobre la música negra. Su popularización sirvió para que muchos músicos pudiesen expresarse y llegar a difundirse en medios locales y nacionales.
Esa es la historia de muchos rockers negros, como el mismo Chuck Berry, quien plasma la realidad social de su entorno en la canción "Johnny B. Goode".
No es sino a partir de los años 1960, cuando decae y deja de ser el ritmo que representaba a los jóvenes rebeldes en los 50, dando paso al género denominado rock o música rock, que marcaría un hito entre la naciente generación joven de los 60.
Sin embargo, de él nacieron distintos subgéneros como el rockabilly, el doo wop o el hard rock, y fenómenos como el de los Teen Idols o las Girl Groups, estos últimos patrocinados principalmente por Phil Spector y de él han derivado géneros como el heavy metal, el garage rock, el punk rock, el rock progresivo o el glam, y entre todos ellos siguen existiendo elementos comunes provenientes del rock n' roll.
Así, Lennon definió al Glam, como "rock n' roll con pintalabios", y a algunos artistas de hard rock o heavy metal como Motörhead o AC/DC les agrada definirse como músicos de rock n' roll.
Análisis musical
En sus inicios y en el estado menos evolucionado, el rock and roll fue un estilo de música sin ninguna influencia blanca que se sirvió de las nuevas técnicas de amplificación de guitarra para comenzar a darle el rol fundamental que lo caracterizaría el resto del siglo.
Aparte de la guitarra, la batería y el piano fueron elementos igualmente fundamentales.
Solistas y bandas fundadoras
1956-1964: La década inicial.Sandro, considerado uno de los primeros rockeros del país, influyó decisivamente en el nacimiento del rock argentino. Es notable su estética Elvis.
El rock and roll como dijimos anteriormente surge en los EE. UU sobre una base de rhythm & blues; ganando popularidad en los años "50, con músicos como Elvis Presley y Bill Haley (quien visitó la Argentina en 1958), y despertando el interés de varios artistas argentinos en imitar esos sonidos.
Entre esos primeros artistas se encontraban Eddie Pequenino.
La primera agrupación de rock argentina fue Mr. Roll & The Rockers, una banda liderada por Eddie Pequenino, formada en Buenos Aires en 1956 y que tuvo a Lalo Schiffrin como pianista.
La misma interpretó temas de grupos norteamericanos, teloneó a Bill Halley cuando visitó la Argentina e hizo sus propios temas, grabados en un LP por el sello CBS.
Un importante fenómeno para el rock argentino en sus comienzos fueron los músicos chicanos y mexicanos de rock de fines de los "50 y comienzos de los "60. En el primer caso Ritchie Valens impuso en 1957 en La Bamba, el primer hit mundial del rock en español.
En el segundo caso, bandas como Los Teen Tops, Los Blue Caps y Los Locos del Ritmo realizaron adaptaciones en español de temas de Elvis, Chuck Berry, Little Richard, Buddy Holly y otros, que se volvieron clásicos latinos como La Plaga y Popotitos.
Muchos artistas de la época admitieron que esas bandas mexicanas tuvieron una fuerte influencia en los comienzos del llamado "rock nacional" argentino tales como Los Gatos y varios más, no sólo en Argentina sino en casi todos los países de habla hispana.
Litto Nebbia dice en su libro "Música progresiva argentina" que se unió a una banda en 1961 en Rosario y que en ese momento existían muchos grupos influenciados por el rock mexicano.
Las bandas estadounidenses eran la fuente de la música y las mexicanas las que tomaban ese sonido y lo exportaban al resto de la región. Fue en este contexto en el que apareció el primer ídolo fulgurante del rock argentino, Billy Cafaro, quien tuvo un efímero pero resonante éxito con sus singles Pity Pity, Personalidad, Marcianita
En julio de 1961 se graba el simple en 45 rpm, el primer rock en castellano compuesto y cantado por un argentino: El Rock del ton ton y en el lado B el tema de Armando Trejo, Vuelve Primavera.
El apuro de la compañía discográfica por lanzar el éxito musical es tal, que el disco sale sin su nombre. RCA Victor cuenta con una placa que vende más de 1.000.000 de ejemplares en muy poco tiempo.
Éxito en radios, presentaciones y en las calles surge un muchacho con una voz personal, un aire de Elvis y un fraseo argentino que compone, baila, canta y propone una nueva música que todos siguen: es Johny Tedesco.
Tedesco tenía su primer disco de Oro en 1962 y su viaje a Hollywood lo consolida como el intérprete en castellano de éxitos de rock de reconocimiento internacional y conoce al Rey del Rock´n Roll Elvis Presley.
Temas que también serían luego interpretados por otros cantantes argentinos.
Posteriormente Sandro graba versiones de Elvis que Johny había grabado: "Eres un ángel disfrazado", "Bésame pronto", entre otros.
Luego seguiría con "Presumida," "Un montón de amor", "Preciso tu amor esta noche", "Ocho días a la semana," "Coqueta", "La plaga", entre muchos otros temas de su repertorio que confirman su estilo de Rock, twist, blues que abrieron un sendero para que el Rock se instalara y continuara en su evolución permanente.
En 1963 Sandro y Los de Fuego grabaron una serie de versiones de temas de rock clásico y beat, también cantadas en castellano, "Te conseguiré", "Anochecer de un día agitado", "My bonnie", "El dinero no puede comprarme amor", convirtiéndose en uno de los grupos de mayor éxito comercial del momento.
Luego Sandro continuaría la carrera como baladista melódico/romántico que lo llevaría a la fama en toda América Latina, abandonando para siempre el rock. Sandro fue en general rechazado por el mundo del rock argentino, mayoritariamente de clase media, al ser tildado de "grasa", un término despectivo para referirse a ciertos gustos populares, generalmente de sectores trabajadores. Su tema "Tengo" ha sido considerado el Nº 15 entre los 100 mejores de la historia del rock argentino, por la cadena MTV y la revista Rolling Stone.
A partir de los años 90 el rock nacional revalorizaría a Sandro, y varias bandas incluyeron sus temas en el repertorio rockero, algunas de las cuales se volverían importantes éxitos, como "Dame fuego".
1964-1975: El nacimiento del rock nacional
Invasiones británicas y uruguayas
La banda beat Los Shakers fue una de las más destacadas de las "invasiones uruguayas".
En 1964 al igual que en el resto del mundo el fenómeno Beatles cayó como una bomba en la Argentina.
El rock internacional empalmó con una generación (nacida aproximadamente entre 1945 y 1960), politizada y movilizada a través de organizaciones estudiantiles y sindicales, que comenzaba a enfrentarse en la calle a las dictaduras militares (sobre todo a partir de 1966), con una activa participación de los jóvenes, tanto varones como mujeres, de la extensa clase media del país.
Esa generación simbolizó su identidad con el rock y la revolución sexual, que opusieron como ruptura radical al tango y a la doble moral machista de sus padres.
En la Argentina las llamadas invasiones inglesas (con bandas como The Beatles y, especialmente, los Rolling Stones, que influyen a bandas argentinas hasta el día de hoy) fueron mucho más influyentes que la ola de rock & roll clásico estadounidense, tanto para el gusto juvenil inicial por el rock & roll internacional como para el surgimiento del rock argentino.
Los Jets fueron unos de los imitadores de los Beatles más populares en el país, llegando a grabar varios discos con adaptaciones de las canciones del cuarteto de Liverpool.
Pero fueron las notables "invasiones uruguayas" de 1964-1965 las que contribuyeron decisivamente en Argentina para que se comenzara a tocar rock en el país.
Inspirados en el nuevo rock británico, muchos músicos jóvenes uruguayos, comenzaron a emular sus sonidos.
Tres bandas, Los Shakers, Los Mockers y Los Walkers, tomaron el estilo de los Beatles y los Rolling Stones, respectivamente, cantando en inglés y así pasaron a Buenos Aires.
Así fue que, a mediados de los años 60, las bandas beat uruguayas alcanzaron un pico de popularidad en Sudamérica. En aquel entonces era impensable que una banda de rock latinoamericana pudiera tener éxito internacional.
El éxito de las bandas uruguayas fue una notable excepción y solo se limitó a la vecina orilla porteña.
De entre todos los grupos uruguayos, Los Shakers se destacaron en particular. Si bien eran un grupo beat inspirado abiertamente en los Beatles, su sonido se destacó con un estilo propio, una notable calidad musical en sus interpretaciones y originalidad en muchas de sus composiciones.
Los Shakers comenzaron a presentarse en vivo en muchos programas de televisión de Uruguay, Argentina y demás países. Debido a su decisión de no desarrollar las letras de sus canciones en castellano, su popularidad decayó. Hoy en día son considerados como una de las bandas más destacables de los años "beatleros".
Mediados y fines de los años "60
Los Gatos Salvajes en 1964:
La historia de los Gatos comienza allá por el año 1964 cuando en Rosario, en la provincia de Santa Fe, se conocen Litto Nebbia y Ciro Fogliatta y deciden crear un grupo a imagen y semejanza de sus admirados Beatles. Idean el nombre de "The Wild Cats" pero Litto y Ciro se deciden por la traducción al idioma telúrico como "Los Gatos Salvajes" y bajo ese nombre grabaron, en el invierno del "65, su primer y único LP.
Un año después el grupo cambió algunos integrantes y también su nombre original por el de "Los Gatos". No sólo cambiaban los nombres de las bandas y sus historias sino que también comenzaba una etapa de cambios en el gobierno de la nación, donde Juan Carlos Onganía se hacia cargo del sillón presidencial, después del golpe militar del 28 de junio.
El nuevo orden militar disolvió los partidos políticos, anuló el derecho de huelga y en el mes de julio desató una violenta represión contra el estudiantado, recordada como "La noche de los bastones largos".
Un mes después del golpe de estado, las universidades públicas argentinas estaban organizadas de acuerdo a los principios de la Reforma Universitaria, que establecían la autonomía universitaria del poder político y el cogobierno tripartito de estudiantes, docentes y graduados.
El estallido ocurrió el 28 de julio de 1966 cuando estudiantes y docentes manifestaban en la Universidad. La represión fue particularmente violenta en las facultades de Ciencias Exactas y Naturales y de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires.
La policía tenía órdenes de reprimir duramente. El nombre proviene de los bastones largos usados por la policía para golpear con dureza a las autoridades universitarias, los estudiantes, los profesores y los graduados, cuando los hicieron pasar por una doble fila al salir de los edificios, antes de ser introducidos en los camiones para llevarlos detenidos.
Fueron detenidas 400 personas y destruidos laboratorios y bibliotecas universitarias. Como resultado de esta política represiva, cientos de científicos e investigadores se exiliaron, lo que constituyó una significativa "fuga de cerebros".
En el ámbito musical la represión se sintió de la misma forma, prohibiendo artistas, y cantantes que encontraron como único refugio el exilio. (Mercedes Sosa, Atahualpa Yupanqui, entre otros).
La dictadura de Onganía entre otras prohibiciones incluía el uso del pelo largo, que podía ser podado en cualquier comisaría, también mostraba una especial preocupación por la conducta sexual de las parejas en los parques.
Como toda dictadura militar, mientras los hombres de uniforme se ocupaban de la "moral y las buenas costumbres" sus socios liberales se ocupaban de la economía y posibilitaban que las transnacionales y sus sirvientes nativos hicieran grandes negocios a costa de la mayoría del pueblo argentino.
Menos comprometidos con la realidad del país, llegan como dijimos anteriormente desde Uruguay Los Shakers, de los hermanos Fattorusso, y poco a poco todos comenzaron a converger en Pasarotus, un boliche de jazz en Pueyrredón al 1700 que cambió su denominación por La Cueva, un lugar que, junto a La Perla de Once, Plaza Francia, el Instituto Di Tella y algunos otros pocos sitios marginales o casi desconocidos, fueron centros de reunión del incipiente movimiento.
Los primeros en grabar fueron Los Beatniks, (cuyo líder Mauricio Birabent con el tiempo pasaría a llamarse Moris) quienes en junio de 1966 lanzaron a la calle su primer simple "Rebelde". Vendieron solo 200 copias.
En 1967 Litto Nebbia y Los Gatos dieron la primer estocada: su disco simple debut, "La Balsa"-"Ayer nomás", vendió nada menos que 200.000 copias.
El rock argentino tenía su primer éxito masivo y el movimiento cobraba fuerza. Comenzaron los festivales, los productores prestaron mayor atención al fenómeno, apareció la revista "Pinap", la legión de jóvenes se engrosó considerablemente y nuevos músicos se atrevieron a mostrar lo suyo.
Con la aparición de Manal y Almendra, junto con Los Gatos, el rock tenía su trilogía esencial, y aquellos tibios intentos de Los Beatniks y otros comenzaban a dar sus frutos.
La década del '70 recibió al rock como movimiento en pleno desarrollo. Ya no sólo estaba Almendra, Manal y Los Gatos. Nuevas bandas y solistas se sumaban al género, cada uno con sus propias ideas, sueños y convicciones: Vox Dei, Arco Iris, Pedro y Pablo, La Barra de Chocolate, La Pesada del Rock and Roll y muchos otros. Por entonces, el incipiente rock argentino era denominado "Música Beat".
Pero el rock iba más allá del éxito momentáneo con estribillos pegadizos. En Belgrano surgió Almendra, con Spinetta a la cabeza. En Caballito, de la unión de Charly García y Nito Mestre se forma Sui Generis. Miguel Peralta, cantante folklórico, se asomó un día por La Cueva y aceptó como desafío y a modo de repudio cantar "Vidala del angelito"
Lo aplaudieron a rabiar. Muy pronto se haría llamar Miguel Abuelo. El grupo conformado por Gabis, Martinez y Medina tocaba Blues y se llamaba Manal.
Almendra tuvo mejor suerte y su tercer simple se convirtió en un éxito: "Tema de Pototo" luego "Muchacha ojos de papel" se convertiría en otro gran clásico del rock nacional.
Un grupo de Quilmes llamado Vox Dei venía pisando fuerte. Su primer simple, Azúcar amarga, dejó claro su enorme potencial. Los festivales comenzaron a ponerse de moda.
El primer concierto masivo fue el Festival Pinap, organizado por la revista del mismo nombre. 12.000 personas llegaron al lugar para ver los shows de Almendra, Manal y otros grupos de barrio. En 1969, se separan
Los Gatos momentáneamente y volvieron a reunirse con Pappo reemplazando a Galiffi.
Se volcaron a un estilo más rockero hasta que se disolvieron definitivamente a fin de año. Pappo forma: Pappo"s Blues, Aeroblues y posteriormente sería Riff hoy una leyenda.
La relación de los de Almendra se desgastó y terminaron separándose. Manal grabó un disco brillante, pero el sello comenzó a zozobrar financieramente y Manal se separó.
La Cofradía de la Flor Solar fue el primer grupo en intentar un modo de vida comunitario.
Aparecieron en 1969, grabaron en 1971 y apoyaron a otro dúo que venía trabajando desde hace tiempo: Pedro y Pablo, es decir Miguel Cantilo y Jorge Durietz..
En 1971 Vox Dei dejó grabada la primera obra conceptual: "La Biblia". Los medios de difusión seguían vedados para la gran mayoría de los rockeros.
En febrero de 1970 apareció la revista "Pelo" con los objetivos de apoyar a los progresivos y diferenciarlos de los complacientes, pero eso no bastaba para apuntar a un movimiento que cada vez contaba con mayor cantidad de artistas y recitales.
Los festivales B.A. Rock -organizados por "Pelo"- congregaban multitudes, pero los medios de comunicación tergiversaban los acontecimientos y las posibilidades de trascendencia masiva no eran muchas.
En el período 72-73 se produjo un sub-movimiento que, resistido en un principio por los propios rockeros, logró finalmente allanar el camino de la masividad: el rock acústico.
Color Humano, Pescado Rabioso, Aquelarre, Vox Dei, Arco Iris, Alma y Vida, Moris, Litto Nebbia, Pappo"s Blues y algunos pocos más, eran los nombres importantes del panorama, pero la aparición del rock acústico de la mano de León Gieco, Raúl Porchetto, Miguel y Eugenio, Vivencia , Pastoral y Sui Generis modificó las estructuras musicales y amplió el horizonte.
Ya no se necesitaban instrumentos eléctricos para comunicar el mensaje del rock. En el auditorio Kraft de la calle Florida se produjo un "acústicazo" de entrecasa. León Gieco, Raúl Porchetto y Sui Generis brindaron dos shows sorpresivos bajo el nombre de Porsuigieco.
La violencia ya era pan de todos los días en Argentina, y se trasladó también al rock. Primero fue la muerte de José Alberto Iglesias, Tanguito, quien terminó su vida bajo las ruedas de un tren en Palermo.
Los grupos más populares del '75 fueron Aquelarre, Invisible y Sui Generis que con "Confesiones de Invierno" consolidó su prestigio y pegó el estirón con "Pequeñas anécdotas sobre las instituciones".
Ese disco fue censurado por ser una sátira sobre la vida política del país. Tuvieron que dejar fuera dos temas, "Juan represión" y "Botas locas", y pulir otros tres temas. Un grupo similar a Sui Generis fue Vivencia, quienes lograron el éxito con el tema "En mi cuarto".
Otro dúo acústico fue Pastoral, y su momento llegaría con su segundo disco, "El Hospicio". Ya en 1975, Sui Generis era el número indiscutido del rock argentino y su separación a fines de ese año congregó una verdadera multitud en el estadio Luna Park.
El 24 de marzo de 1976, la presidente Isabel Perón es derrocada por un golpe militar, y el nuevo gobierno ajustaría las clavijas en el rock que, como movimiento joven, pasó automáticamente a ser considerado sospechoso.
Con la separación de Sui Generis tres nuevas agrupaciones surgieron y captaron la adhesión de un amplio sector de audiencia: Los Desconocidos de Siempre (Nito Mestre), La Máquina de Hacer Pájaros (Charly Garcia) y Polífemo (David Lebón).
Muchos de los pioneros del rock argentino habían emigrado al exterior en busca de nuevos horizontes. Ya no estaban Edelmiro Molinari, Miguel Abuelo, Miguel Cantilo, Claudio Gabis, Javier Martinez y otros, pero Invisible, Gieco, Porchetto, Alas, Arco Iris, Soluna, Nebbia Trío, Espíritu, Crucis, El Reloj y muchos otros cubrían las necesidades de un público que seguía aumentando en número.
El rock seguía adelante pero el clima de represión y terror comenzó a hacerse sentir. Muchos músicos eligieron exiliarse. Otros optaron por resistir. En la Argentina de 1976 nadie podía sentirse seguro, y el rock no era excepción a esa regla.
El rock nacional antes y después de la guerra de Malvinas
1976-1982:El Golpe de Estado del año 1976, dio inicio al período más oscuro y sangriento de la historia argentina. Los músicos de rock, considerados "subversivos", sufrieron los embates de la dictadura militar.
Muchos se vieron obligados a irse del país. Otros buscaron resistir e insistir con su arte. Ser joven era ser "sospechoso", estar asociado a "cosas raras".
Para muestra basta un botón: en noviembre de 1977, el almirante Emilio Massera dio un discurso en la Universidad del Salvador, e instó a no seguir el ejemplo de los jóvenes "que se inician en el rock y derivan en la guerrilla".
Eran tiempos de la película "Fiebre de sábado por la noche", la música disco, el baile que sustituía al canto, y el inglés que reemplazaba al castellano.
Escuchar rock o asistir a los pocos recitales que se hacían era un símbolo de resistencia.
Para los jóvenes, la música era casi una excusa para forjar su identidad, su grupo de pertenencia.
León Gieco, rockero con raíces folclóricas, fue un baluarte importante en este período. Sus canciones eran nuevamente censuradas por los grandes medios, pero no podían evitar que el público siguiera sus presentaciones.
El genio de Charly García hizo un aporte fundamental, acompañado por excelentes músicos. Con David Lebón, Pedro Aznar y Oscar Moro formó Serú Girán, banda que muchos definieron como "Los Beatles argentinos".
Sus letras lograron gambetear la censura del terrorismo de Estado. Con sutileza, energía e ingenio, las canciones de Serú se convirtieron en himnos para la juventud. Grabaron su primer disco en mayo de 1978, a pocos días de comenzar la euforia por el Mundial de Fútbol.
Algunos clásicos intentaron la vuelta, como Manal, Almendra, Moris y Miguel Cantilo. Pappo fundó el grupo Riff, con un perfil de rock más pesado que Pappo's Blues, su anterior banda.
En La Plata nacía Virus, una expresión new wave de los hermanos Federico y Marcelo Moura. El rock andino tenía sus representantes en Los Jaivas, Ollantay y Tantu Kay. En Mendoza debutaban Los Enanitos Verdes. Otros protagonistas de esos años que pisaban los '80 eran Spinetta Jade, Suéter, Dulces 16, Ariel Prat y su Banda Elástica, Rubén Rada, Alejandro del Prado y Solopororó, liderado por Alejandro Lerner.
Había música para todos los gustos en los circuitos de bares y recitales, pero las radios le daban la espalda. Hasta que una locura militar le abrió una puerta inesperada al Rock Nacional.
La Guerra de Malvinas de 1982 trajo consigo la prohibición de pasar música anglosajona por las radios.
Los programadores recurrieron entonces a las grabaciones de artistas argentinos. Fue el empujón clave para que el gran público conociera a todas esas expresiones jóvenes que en su momento marginaban.
El 16 de mayo de 1982 se organizó en Obras Sanitarias el Festival de la Solidaridad Latinoamericana, para juntar ropa y alimentos para los soldados que combatían en Malvinas.
Más de 60 mil personas estuvieron en el estadio, y muchos más siguieron las transmisión en vivo del concierto de Gieco, Spinetta, Mestre, Rada, García y Lebón (estos dos últimos ya habían desarmado Serú Girán en marzo), entre otros. La era de la masividad había llegado.
El fracaso en Malvinas marcó el comienzo del fin para la dictadura militar, con su consecuente apertura política e ideológica.
El Rock Nacional, ya instalado, comenzó a crecer en cantidad y calidad de bandas. Los nuevos se sumaban a los clásicos, y el panorama se amplió.
El 30 de octubre de 1983 los argentinos volvían a las urnas, con fondo musical rockero.
a trágica jugada guerrera en las Malvinas tuvo como pilar un auge de carácter nacionalista y anti-inglés que permitió que los "enemigos internos" -como los militares consideraban a los jóvenes rockeros- fueran oficializados y bendecidos ante la nueva realidad.
Grupos y solistas incluidos en el circuito rockero y de la canción popular que eran prohibidos y perseguidos hasta el extremo de padecer que cada recital tuviera un curso incierto y peligroso para ellos y su público, fueron asimilados y estimulados "gracias" a la prohibición de la música en inglés en las radios y en la TV.
Así fue que tanto los rockeros como los cantautores, señalados por "jóvenes" y "extranjerizantes", lograron acceder a un circuito formal que les estaba vedado y hasta pudieron, en medio de la celebración malvinense, colar estéticas y canciones que también cuestionaban la dictadura militar instaurada en 1976.
León Gieco patentó como himno "Sólo le pido a Dios" pero también cantó "El país de la libertad"; Pedro y Pablo cuestionaron a Margaret Thatcher en "Señora violencia e hijos" pero no olvidaron "La marcha de la bronca"; y Charly García resumió devastadora ironía y crítica en "No bombardeen Buenos Aires" sin por ello dejar de lado la denuncia de "Inconsciente colectivo" o "Canción de Alicia".
En el amplio abanico también salió a la luz Víctor Heredia con "Aquellos soldaditos de plomo" y estrenó (casi en paralelo con la derrota militar) su "Informe de la situación"; mientras que hasta Los Violadores fueron bendecidos por hacer "punk argentino", aunque uno de sus hits fuera el explícito "Represión".
El cancionero malvinense tuvo, además de "Sólo le pido a Dios", su hito coyuntural gracias a la entonces difundida "Reina madre", en la que Raúl Porchetto se ponía en la piel de un soldado inglés para relatarle a su majestad británica las vivencias de la guerra en el Atlántico Sur.
La democratización cultural no sólo hizo renacer a los hasta entonces silenciados, sino que posibilitó una apertura federal cuya máxima expresión fue protagonizada por el desembarco de la llamada Trova Rosarina que acompañó la voz de Juan Carlos Baglietto. Ese grupo de artistas integrado por Fito Páez, Rubén Goldín, Silvina Garré, Jorge Fandermole y Adrián Abonizio, entregó canciones como "Mirta, de regreso", "La vida es una moneda" y "El témpano".
La brisa desfachatada, testimonial y local se aglutinó en los pocos meses que duró la batalla en Malvinas, pero esa fuerza estética acallada por años también sirvió para apuntalar el previsible y doloroso saldo de la guerra y el inevitable fin del oscuro imperio de la dictadura.
Malvinas según "El soldado y la reina de las nieves"
Ya sea por el hecho bélico en sí, por su descabellada impronta o por sus trágicos resultados, la guerra de Malvinas no estuvo ni está muy presente en el cancionero argentino, pero el cantautor rosarino Adrián Abonizio incluyó la temática en "El soldado y la reina de las nieves" que formó parte de su tercer álbum "Todo es humo" (2001).
Planteada como una historia de amor, asombro, dolor y testimonio, la canción es una llamativa pieza del también autor de varias de las composiciones básicas que interpreta su coterráneo Juan Carlos Baglietto.
Adrián Abonizio es mentor de temas como "Dios y el diablo en el taller", "Corazón de barco", "Historia de Mate Cosido", "El témpano" y "Mirta de regreso", por citar sólo algunos de los más conocidos.
Otras miradas sobre la guerra
Abonizio no fue el único en abordar el tema de la guerra en sus canciones. En su disco de 1983 "Todo a pulmón", el cantautor Alejandro Lerner incluyó la épica "La isla de la buena memoria". …"No hay mal que no venga al Hombre, no hay un Dios a quien orar / no hay hermanos ni soldados, ya no hay jueces ni jurados / sólo hay una guerra más" clamaba un autor caracterizado por sus canciones de amor como "Por un minuto de amor" y "Testigo el sol".
En su álbum debut de 1989, "Después de la guerra", la banda rosarina Certamente Roma describía la tragedia del conflicto bélico en el tema "Quebrados en el silencio", el mayor hit que tuvo la agrupación liderada por Fabián Llonch.
Rata Blanca también dio su visión de la guerra de Malvinas en "Gente del sur". "No se muy bien / cual fue la gloria / en esta guerra del sur / hoy puedo ver / miles de cruces / en estas islas que Dios / Nos dio a todos los hombres" cantaba Saúl Blanch en el disco debut de la banda de Walter Giardino.
Pero del lado inglés la guerra también inspiró canciones. La más conocida sea tal vez "Brothers In Arms" (Hermanos en armas), que le da título al disco más exitoso de Dire Straits, publicado en 1985.
Junto con la trova rosarina pero no tan comprometidos llegan los Twist, liderados por Pipo Cipollatti, fueron los iniciadores de una corriente musical fresca, divertida, con letras bailables simples y alejadas de la canción contestataria de años atrás.
Las chicas de Viuda e Hijas de Roque Enroll siguieron ese camino. Miguel Abuelo volvió al país y rearmó Los Abuelos de la Nada, esta vez con Andrés Calamaro, Daniel Melingo, Cachorro López, Polo Corbella y Gustavo Bazterrica. Todos componían y cantaban en esa banda que se aprovechaba del pop, funk y reggae. La onda pop se insertaba con éxito, con Miguel Mateos como uno de los líderes de un estilo en principio muy criticado por los rockeros, pero luego aceptado.
El under tenía dos referentes importantes que con el tiempo llegaron a la cima: Sumo y Patricio Rey y Los Redonditos de Ricota. Luca Prodan y el Indio Solari lideraban estas bandas que alcanzaron estatura de mito. Sus seguidores se definían como "gente del palo", y criticaban la ideología "comercial" de los grupos masivos.
Uno de los grupos más importantes del Rock Nacional grabó su primer disco en 1983. Definidos peyorativamente como "modernosos", los Soda Stereo dieron ese año su primer paso hacia el éxito.
Comenzando con pop-rock para luego experimentar con otros sonidos e influencias, destrozarían las críticas y crecerían en popularidad disco tras disco.
En el año 1984 nació el éxito para GIT, un trío formado por Pablo Guyot, Willy Iturri y Alfredo Toth, que integraban la banda de Charly García. Con letras de amor en ritmo de rock, y apoyados en el característico sonido de la batería de Iturri, GIT fue el primer grupo argentino en editar un disco en Estados Unidos.
Ricardo Iorio creó V8, banda metal que duraría tres años. Luego formaría Hermética y Almafuerte y se convertiría en un ídolo de los amantes del rock pesado. Los Violadores surgieron con el punk y fueron uno de los grupos que más sufrió la represión en la primera mitad de los '80.
Sin dudas, 1985 fue un año de grandes discos: "Gulp!", de Los Redonditos, "Divididos por la felicidad", de Sumo, "Locura", de Virus, "Giros", de Fito Páez, "En el Opera", de Los Abuelos de la Nada y "Nada personal", de Soda Stereo.
Miguel Mateos se presentó con Zas en el teatro Coliseo y grabó en vivo "Rockas vivas", el disco más vendido en la historia del Rock Nacional hasta 1992.
Un año más tarde editaron su primer disco nuevas bandas de estilos diferentes. Los Ratones Paranoicos mostraron su rock and roll clásico en una época moderna y pop, mientras que Los Fabulosos Cadillacs atacaron con el ska, al mejor estilo Madness. Con el tiempo, la banda de Vicentico incorporaría ritmos latinos, salseros y afros.
Gustavo Cerati, además de Soda, integraba Fricción, una banda formada con su amigo Richard Coleman. Duraron dos años y editaron dos placas.
En 1987 explotaría el mercado del reggae cantado en inglés por bandas nacionales, espacio que Sumo ya venía frecuentando. El primer éxito comercial lo lograría La Zimbabwe Reggae Band, con su "Natty dread". Luego, Los Pericos venderían 180 mil discos de su "Ritual de la Banana".
La variedad musical de la década no puede quedar completa sin mencionar la fusión de cumbia, rock duro, tango y folclore lograda por Palo Pandolfo en Don Cornelio y la Zona y Los Visitantes.
Tampoco hay que olvidar el vuelo poético y el ritmo de muchas creaciones de Man Ray, la banda de Hilda Lizarazu, o el blues de la Mississippi y Memphis. Ni el suceso de Rata Blanca, primera banda heavy de éxito masivo, o la conjunción de trash, reggae e ideología punk de Todos Tus Muertos.
El estadio de Obras Sanitarias se convirtió en el templo donde las bandas de rock debían tocar para alcanzar la consagración. Varios lograron este privilegio, dejando en el recuerdo las épocas de pequeños escenarios, censura y represión.
A fines de la década murieron tres personajes que fueron clave en la consolidación del Rock Nacional: Luca Prodan (diciembre de 1987), Miguel Abuelo (marzo de 1988) y Federico Moura (diciembre de 1988).
VER VIDEO
A fines de la década murieron tres personajes que fueron clave en la consolidación del Rock Nacional: Luca Prodan (diciembre de 1987), Miguel Abuelo (marzo de 1988) y Federico Moura (diciembre de 1988).
ResponderBorrar